jueves, 14 de febrero de 2008

La bajada de San Valentín

He tenido un regalo!!! (espero que no hayan tenido que matar a nadie para hacerlo!)
Hoy hemos decidido bucear en "La Mariña", lugar de hundimiento de muchos y muy diferentes barcos. El GPS nos señala donde largar el rezón. La marca en el GPS corresponde a un pez. La rutina del equipo hace que a veces no prestemos demasiada atención y por poco esta vez "alguien" se lo pone antes de comprobar si la grifería está abierta. Hoy estreno flash y doy por supuesto que la primera vez es la de los grandes errores. De hecho he tenido que improvisar un adaptador para la fibra óptica. Trabaja. Queremos encontrar, de nuevo, y balizar por 1ª vez las anclas que vimos en una ocasión. Caemos a plomo por el cabo y llegamos a fondo de roca a los 16 metros. La visibilidad es sólo regular (5-7 metros). Después de ajustar equipos buscamos el "Pez" que no es otro que el señor Andres, un bogavante de dudosa reputación que puede llegar a los 3 kilos bien pesados. Siempre en la misma cueva. Fer me hace retroceder para que vea el ancla que se encuentra a 10 metros del Sr. Andres. Es de tipo almirante con un cepo recto en el tope, que acaba en una bola de al menos 20 cms de diametro. Es antigua, al menos de siglo XVIII, o al menos eso es lo que me dicen los articulos y libros que hemos encontrado en la red
Retrocedemos sobre nuestros pasos y nos dirigimos hacia el Este pensando que allí vamos a encontrar lo que hemos venido a buscar. Las algas nos impedían ver con claridad el fondo. Aún así, sabíamos que al menos una de las anclas estaría sin arenar al estar sobre piedra. Seguimos buscando en paralelo intentendo abarcar la máxima extensión posible. Nada
Hemos decidido con 100 bares cambiar la direccion y nos dirigimos al norte buscando menos agua. La carrera que nos damos hace que agotemos rápidamente nuestras cargas. Pero.. Bingo! acabamos de encontrar la Danforth. Con un metro y pico de largo y demasiado cerca de la costa (apenas 200 metros), debió pertenecer a un mercante, que debió usarla de freno de emergencia.
Me da tiempo de sacar algunas fotos para documentar el ancla, y dar fe, pero el tiempo apremia y llevamos 50 minutos de fondo. Acabo de entrar en la reserva y no conviene esperar. Mi compañero me hace señas para que espere y decide dar un corto paseo en circulo mientras me entretengo intentando desacer el nudo de la boya Deco que quiero estrenar, a pesar de no precisarla. En vano. Otra lección: cualquier cosa que quiera hacer bajo el agua mejor tenerla prevista, porque aquí las cosas no funcionan como en la superficie y menos cuando de tu Jacket cuelga, una lampara de 70W que pesa un kilo, una camara con su correspondiente flash y tus manos no responden por el frío. Mejor que pase a 10 metros que a 40. La próxima vez irá perfectamente estibada.
Resultado: dos anclas, varias nasas perdidas, la visita al Sr. Andrés, 57´, 12 grados de frío húmedo del Norte, 17,2 metros de máxima y de nuevo esa sensación de volver a nacer al llegar arriba y el sentimiento de que dejas algo abajo... donde está mi compañero?!!

1 comentario:

TioTaum dijo...

muy buena que es la Danforth
Ya me lo contaras
Isi